La Fundación Ambuibérica, de HTG, explica cómo actuar si somos mordidos por una serpiente

Aunque las mordeduras de serpientes son poco frecuentes, siguen siendo una de las urgencias que se atienden en nuestro país. Ahora que con el buen tiempo resulta muy apetecible pasear por el campo, no está de más conocer algo más sobre los ofidios que viven en la Península Ibérica para evitar, en la medida de lo posible, una inoportuna y desagradable sorpresa. En concreto, existen 13 especies diferentes de ofidios, de las familias de los vipéridos (3, todas ellas venenosas: víbora áspid, hocicuda y de Seoane) y de los colúbridos (10, de ellas venenosas: culebra de Cogulla y bastarda).

Según explican Ana Rozados y Felipe Martínez, voluntarios de la Fundación Ambuibérica, de HTG, cada año, en nuestro país, unas 140 personas requieren asistencia sanitaria por el mordisco de una serpiente, frente a los 8.000 casos que se registran en el continente europeo (en el mundo se producen 125.000 muertes al año). Por comunidades autónomas, Cataluña está a la cabeza de casos, seguida por Castilla y León, Galicia y Andalucía.

De ahí que alerten a la población sobre aspectos como los grados de envenenamiento, sus manifestaciones sistémicas y qué hacer en caso de mordedura.

Grados de envenenamiento

Existen cuatro grados. El más leve es el grado 0, en el que no existe envenenamiento, pero sí las marcas de los colmillos del reptil y un ligero dolor.  En el grado 1 se produce un envenenamiento ligero y, además de las marcas del animal, un dolor intenso y edema local. Cuando se diagnostica un grado 2 se está ante un envenenamiento moderado, con edema progresivo, dolor intenso y manifestaciones sistémicas (hipotensión, náuseas, vómitos, mareos y diarreas). Por último, el grado 3 da cuenta de un envenenamiento grave, edema en la extremidad, dolor muy intenso y una sintomatología sistémica grave (fracaso renal agudo, insuficiencia respiratoria, shock,  trastornos neurológicos y coagulación intravascular).

¿Qué hacer? Primeros auxilios

En el caso de que una persona sea mordida por una serpiente, los voluntarios de la Fundación Ambuibérica recomiendan seguir los siguientes pasos:  

  • Constatar la existencia de lesiones por mordedura.
  • Avisar al Servicio de Emergencias (112).
  • Tranquilizar a la víctima.
  • Retirar prendas de vestir o adornos que opriman (pulseras, anillos, relojes…).
  • Limpiar la zona y desinfectarla sin emplear antisépticos que tiñan intensamente la piel.
  • Evitar un gran esfuerzo caminando. Si se prevé demora en el traslado o es necesario el mismo a pie, se inmovilizará la zona afectada, se elevará y se aplicará crioterapia indirecta.
  • Registrar la hora del accidente, así como el orden de aparición de síntomas  y la evolución.
  • Intentar identificar la especie de serpiente por el aspecto y registrar la situación geográfica, la hora del día y la actitud del ofidio.

¿Qué no hay que hacer?

Entre las acciones que se desaconsejan están las siguientes:

  • La realización de torniquetes, cortes y succión de la herida, la cauterización de la zona o la amputación de esta.
  • Permitir que la víctima ingiera sustancias o bebidas excitantes que pudieran incrementar la actividad cardiaca y, así, la difusión del veneno.
  • Aplicación de remedios caseros.
  • Matar al ejemplar causante de la lesión.